Sumando en la Escuela

Acciones que suman en la escuela son aquellas dirigidas a formar jóvenes capaces y adultos competentes. Que contribuyen a que los centros sean espacios de convivencia armónica donde existan oportunidades para aprender y practicar habilidades y destrezas necesarias para la vida adulta. Que fomenten relaciones de respeto mutuo entre todas las personas de la comunidad educativa.

Sumar en la escuela es dotar a los equipos docentes de herramientas para gestionar las aulas desde un liderazgo eficaz, que modele a los alumnos en la adquisición de valores imprescindibles para nuestra sociedad.

La palabra disciplina viene del latín y significa educar. Su término está centrado en el alumno (discipulus). Con el paso del tiempo ha ido adquiriendo una connotación negativa porque se asocia la idea de disciplinar  a la acción de castigar.

Sin embargo la esencia de la palabra es enseñar, mostrar el camino, educar.

 La disciplina positiva propone usar herramientas basadas en el equilibrio entre la amabilidad y la firmeza para fomentar la cooperación y la colaboración de todos los miembros del grupo  terminando con las luchas de poder y comenzando un camino de armonía y serenidad en el día a día.

Los profesionales de la educación tenemos el reto de trabajar con personas que proceden de diversas realidades a las que enseñar habilidades de vida útiles para su futuro y para la sociedad (autonomía, responsabilidad, autoconfianza, empatía, escucha, compromiso, etc). El día a día de las aulas puede llegar a ser desmotivador. En ocasiones los profesionales tienen la sensación de invertir mucho tiempo y esfuerzo y no ver resultados .

La disciplina positiva enseña a  identificar cuáles son las metas del comportamiento y ofrece herramientas al adulto para guiar a los alumnos hacia dichas metas de forma adecuada.